Hay lugares tantas belleza e historia, con tanto que ofrecer que pueden parecer inabarcables. Sevilla es uno de esos lugares.
Ciudad mágica, cruce de culturas, muestra de arte que se aprecia en sus monumentos, alegría en sus calles, sus plazas, sus gentes…Entre la pasión y la modernidad. Una conjunción de sentimiento y tradición.
Tanto que ver, hacer y sentir…Sevilla tiene algo, “duende” se dice por el Sur, pero en realidad, el olor que recorre por su calles lo hace única. Ese azahar por el día durante las mañanas de abril o ese jazmín por las noches, hace que la mezcla que deja al visitante lo lleva en su interior hasta bastante tiempo después de estar en la ciudad.
Sevilla, es la ciudad andaluza más especial . Éste "duende" se puede ver en sus gentes, alegres, simpáticas y acogedoras. Se siente en sus calles, en sus monumentos, en las plazas, en los parques, en su luz, en el flamenco, en el baile, en el cante, en la obra de los artistas sevillanos. En el perfume de sus flores y el perfume a jazmín.
El duende está presente en cada rincón y son muchos los monumentos de los que puede presumir la capital de Andalucía.
Hay un gran número de hoteles que ofrecen opciones de hospedaje para todos los bolsillos
Situada junto al río Guadalquivir, Sevilla presenta algunas de los más renombrados monumentos tales como los Alcázares Reales, una muestra brillante de la arquitectura mudéjar; el Salón de los Embajadores, conocido por sus formas de naranja (medio-techo en forma de naranja), la Catedral, la tercera iglesia más grande de Europa, y la Giralda.
Más sobre Sevilla
Por todos los barrios de Sevilla se puede encontrar jardines frescos y cómodos donde relajarse y pasar un buen rato. Los hoteles en Sevilla suelen estar situados cerca de los lugares turísticos más relevantes para facilitar a los turistas su estancia en la ciudad.
Un paseo por Sevilla nos permitirá descubrir porque se dice que tiene DUENDE.
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